Valentina Galeana
El pueblo de Veracruz guarda particularmente memoria del 4 de mayo de 1858, Benito Juárez inicia su Gobierno en la Ciudad, se fecunda la nación con heroísmo, con la plenitud de la conciencia republicana, con la creación de las leyes de reforma que cambian la estructura a las antiguas formas de la sociedad por tales hechos la vigencia, de Benito Juárez no es discutible; sus actos y la prueba resistida del tiempo lo colocan entre las figuras centrales de los mexicanos van en él las raíces y la fuerza necesaria para llevar a cabo la vocación y el destino de la patria.
El Benemérito se adelanta a su generación por su voluntad de cumplir los principios y las leyes; lo distingue su mente que gustaba de las razones eficaces y comprendía los hombres, lo engrandece un civismo cultivado con la máxima entrega, ni una palabra vacía, ni un valor sin contenido Juárez desde 1855, en que sirve al Ministerio de Justicia y de la instrucción pública hasta la hora de su muerte identifica su existencia con la salvación nacional.
A bordo de la embarcación Tennessee, llegaron el presidente Juárez y sus acompañantes al puerto de Veracruz la tarde del 4 de mayo de 1858, fueron recibidos por el gobernador Manuel Gutiérrez Zamora y miles de veracruzanos que les dieron una entusiasta bienvenida era claro, no se resolvería a corto plazo la lucha contra la Constitución de 1857, atrajo a los mejores militares que querían que permaneciera el viejo régimen militar clerical así que el combate se tornó encarnecido, la traición de Parrodi en Jalisco la de Manuel doblado en Guanajuato así como las derrotas de Salamanca y Guadalajara mostraban que la correlación de fuerzas no era favorable pero la indignación popular crecía y la presencia del presidente era un factor que levantaba mucho la moral de la Liga de gobernadores permanecían y levantaban grandes ejércitos Santiago Vidaurri, gobernador de Coahuila y Nuevo León González Ortega de Zacatecas y Santos degollado en Colima, se reorganizaban en Veracruz, Juárez había tenido al fin la oportunidad de mandar traer a su familia y reunirse con su esposa Margarita lo que le dio fuerza y ánimo, para llegar de Oaxaca a Veracruz Margarita tuvo que realizar un viaje muy peligroso emprendiendo jornadas nocturnas para atravesar la Sierra de Ixtlán, así como Juárez combatió la dictadura de Santa Ana y mantuvo a raya a Porfirio Díaz y derrotó al imperio que intervino a México.
Está pendiente la tarea de rescatar a nuestro país para que triunfen la democracia, la justicia, la paz, la soberanía nacional y popular, en estos momentos nada mejor que aprender de la lucha, las derrotas, los triunfos y la experiencia del pasado para organizarnos hoy. Abrir paso al futuro de México que está llamando a dar un nuevo ejemplo al mundo entero como lo dio en el siglo XIX al derrotar al imperio.
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