Pedro Moctezuma Barragán y Alfonso Cortez Lara
La lucha de los mexicalenses para evitar que en una región de grave escasez de agua se ponga al servicio de una trasnacional que busca acaparar el vital líquido para satisfacer la apetencia del mercado estadunidense, logró que el 21 y 22 marzo 2020, la Secretaría de Gobernación realizará una consulta a la población de Mexicali para determinar si querían o no, que la empresa Constellation Brands concluyera su fábrica de cerveza en esta zona de extremo estrés hídrico. El 76 % de la población votó abrumadoramente en contra. Esta consulta cumplió con la obligación establecida en la Observación 15 del Pacto de Derechos Económicos, Sociales y Culturales sobre el Derecho al Agua, vinculante para México. Ante ello el presidente Andrés Manuel López Obrador se comprometió con sus resultados.
¿De dónde viene el agua de Constellation? El Distrito de Riego 014 que controla el 85% del agua del Río Colorado que EEUU entrega a México por el Tratado de 1944, le vendió 4.3 millones de m3/año de su concesión (1), mismos que fueron “donados” a Comisión Estatal de Servicios Públicos de Mexicali, para ser recontratadas a Constellation Brands, a 20 años. Estas aguas siguen apareciendo en el Registro Público como concesionadas al DR 014 para uso agrícola. El padrón del mencionado Distrito registrado ante Conagua, incluye a los siguientes usuarios no agrícolas, por un total de 36.4 millones de m3/año: Banco J.P. Morgan, Banco Nacional de México, Bancomer; Compañía Siderúrgica de California, Ingeniería y Obras Servicios Industriales California y ocho inmobiliarias entre otros.
A pesar de las declaraciones y posturas públicas manifiestan, que durante los tiempos de campaña hicieran los candidatos, particularmente por parte de quién competía por Morena para gobernar Baja California –Jaime Bonilla Valdez-, en contra de la planta cervecera en Mexicali, en la práctica, una vez instalados en el poder ejecutivo, los discursos y acciones de apoyo a la abierto a la planta cervecera, fueron notorios. Burlándose del pueblo y el gobierno mexicano en agosto de 2020, Constellation Brands reanudó la construcción de su cervecera en Mexicali.
Parecería que el contundente rechazo de la sociedad mexicalense expresado con un rotundo 3 a 1 de los votos sufragados en contra ha sido desdeñados por la trasnacional. Desde entonces, se ha realizado una campaña mediática intensa y permanente desde diferentes instancias gubernamentales aduciendo la posibilidad de adquirir volúmenes adicionales a los derechos de agua ya obtenidos de manera poco transparente “entre particulares” con posibles irregularidades de orden legal, por violar la prelación para la transmisión de derechos entre el uso agrícola y el uso industrial autorizada indebidamente por la Conagua.
La reacción de los colectivos locales y ciudadanos activos en defensa del agua y en contra de la instalación de la cervecera no se hizo esperar. A pesar del contexto de contingencia, en julio del 2020 iniciaron una serie de misivas dirigidas a la Presidencia de la República. A partir de entonces han salido a las calles y realizado una rueda de prensa para evidenciar que la empresa continúa activa. Con ello, inició una nueva era de actividad social intensa dentro de la etapa post-consulta pública para enfrentar la férrea intención de Constellation Brands por mantenerse en Mexicali.
El problema se originó porque la Ley de Aguas Nacionales (LAN) salinista permite la compra y venta de concesiones de aguas nacionales. Solo se solucionará cuando una Ley General de Aguas abrogue la LAN y prohíba dichas transacciones. Debido a ello, como parte de la hidrocracia, Constellation Brands, junto con la Coca Cola, han promovido desde su gremio el Consejo Consultivo del Agua el apoyo a la Ley Mata Flores, simulación que pretende presentar en el Congreso una ley general de aguas que mantenga vigente la Ley de Aguas Nacionales con un pegote de “derecho humano al agua” sin instancias, instrumentos ni mecanismos concretos que lo aterricen.
*Contrato firmado 14 febrero 2018 reproducido en: http://monitoreconomico.org/media/pdf/edicion-digital/2018/11/25/26_noviembre_2018.pdf:
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