TML Supplement No 44. Julio 27 de 2024
Del 21 al 23 de julio, catorce grupos de la resistencia palestina se reunieron en Pekín en una conferencia organizada por China. Hamás, la Yihad Islámica Palestina, el Frente Popular para la Liberación de Palestina, el Frente Democrático para la Liberación de Palestina y Fatah, fueron algunas de las organizaciones presentes, que el 23 de julio emitieron conjuntamente la Declaración de Beijing sobre el Fin de la División y el Fortalecimiento de la Unidad Nacional Palestina.
Los grupos palestinos presentes en la reunión de alto nivel también acordaron activar el Marco Unificado de Liderazgo Temporal y garantizar que se reúna periódicamente.
Además de los representantes de los 14 grupos palestinos, a la ceremonia de clausura asistieron enviados diplomáticos a China o sus representantes de Egipto, Argelia, Arabia Saudita, Qatar, Jordania, Siria, Líbano, Rusia y Turquía.
Después de la ceremonia de clausura, el representante de Hamas en el Líbano, Ahmad Abdel Hadi, elogió la Declaración de Beijing, señalando que bloquea los planes de Estados Unidos e Israel para dividir y debilitar la resistencia palestina y mantiene la iniciativa firmemente en manos del pueblo palestino.
Esta declaración histórica ha sido aplaudida por los palestinos y sus aliados en todos los países. Es un éxito histórico para la resistencia y el pueblo palestinos, así como para todos aquellos que han estado con ellos desde 1948. Además de otras cosas, zanja todos los intentos sionistas de EE.UU. e Israel de poner a un régimen a su servicio a cargo de un estado palestino.
Este avance profundiza la crisis de Estados Unidos y el estado sionista israelí, junto con las fuerzas, incluido Canadá, que han seguido financiando y apoyando a Israel sobre la base de que tiene el derecho a la "autodefensa", un derecho que no puede reclamar como potencia ocupante. El logro de las fuerzas de la Resistencia Palestina aísla aún más a sus enemigos sionistas y hace avanzar la lucha de la humanidad por un nuevo orden mundial basado en las aspiraciones de los pueblos a la justicia, el estado de derecho y la paz.
Mientras el pueblo palestino celebra este logro histórico, la gente en Estados Unidos y en todo el mundo organizó acciones masivas para denunciar la visita del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu a Estados Unidos, pidiendo su arresto como criminal de guerra y el fin del apoyo que Estados Unidos y otros países le están dando a Israel para cometer genocidio contra los palestinos.
Mientras tanto, con el apoyo de Estados Unidos, Gran Bretaña y otros países, los crímenes de los sionistas aumentan cada día que pasa. Esto fue denunciado a fondo en Estados Unidos, así como en Canadá, donde se llevaron a cabo manifestaciones masivas militantes que exigían el arresto de Netanyahu y que el apoyo al genocidio sionista de los palestinos terminara de inmediato. La visita de Netanyahu a Estados Unidos fue una declaración de que podía desafiar el fallo de la Corte Penal Internacional emitido en junio de que debía ser arrestado por sus crímenes. La oposición militante de la clase obrera y el pueblo de EE.UU. pone a la élite gobernante del Partido Demócrata envuelta en una campaña electoral sobre aviso de que se desvincule de Netanyahu si quieren superar la división en sus filas.
El Partido Comunista de Canadá (marxista-leninista) felicita al pueblo palestino y a sus fuerzas de resistencia por haber logrado este éxito histórico y se mantiene unido a ellos en su camino hacia la victoria final.
Aspectos destacados de la Declaración de Beijing
En la Declaración se destacaba que los signatarios:
- Se comprometió a "poner fin a la división nacional palestina" y a "unificar los esfuerzos nacionales para enfrentar la agresión israelí y detener el genocidio".
- Afirmó "el derecho del pueblo palestino a resistir la ocupación y ponerle fin de conformidad con las leyes internacionales, la Carta de las Naciones Unidas y el derecho de los pueblos a la autodeterminación".
- Comprometido con el establecimiento de un Estado palestino independiente "con su capital en Al-Quds (Jerusalén) de conformidad con las resoluciones internacionales, especialmente 181 y 2334, y garantizando el derecho al retorno".
- Acordó formar "un gobierno temporal de unidad nacional con el consenso de las facciones palestinas y por una decisión del presidente basada en la Ley Básica Palestina".
- Trabajará para garantizar que el gobierno así formado "ejerza sus poderes y autoridades sobre todos los territorios palestinos, confirmando la unidad de Cisjordania, Al-Quds y la Franja de Gaza".
- Continuará "resistiendo y frustrando los intentos de desplazar a nuestro pueblo de su patria, especialmente de la Franja de Gaza, Cisjordania y Al-Quds".
- Trabajarán juntos para "levantar el asedio bárbaro contra nuestro pueblo en la Franja de Gaza y Cisjordania y entregar ayuda humanitaria y médica sin restricciones ni condiciones".
- Acogió con beneplácito la opinión de la Corte Internacional de Justicia del 19 de julio "que confirmó la ilegalidad de la presencia, la ocupación y los asentamientos" en la Palestina histórica.
- Se comprometió a monitorear la implementación de las cláusulas del acuerdo "con la ayuda de Egipto, Argelia, China y Rusia".
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